Escribo en los márgenes,

Ocupando los extremos

Circundantes al centro,

Que no es posesión de nadie.

Anoto en los silencios

El claudicar del tiempo,

Viajero incontenido,

Usurero,

Apostador mustio de edades y espacios.

Oigo la trémula voz de los lamentos

Que erosionan al circunspecto ruido

De las callejas más sórdidas,

Donde la mugre anquilosa

Los aflictivos llantos de la pobreza.

Caritativos…

Adormecidos, sin huida,

Permanecen estables
A la sombra de la amargura.

Ped.

Comentarios

Entradas populares de este blog