Luces
Hay luces
en mi cabeza. Revolotean como mariposas sobre las flores en primavera. Son de
distintos colores. Azules, rojas, verdes, amarillas, blancas… Son iguales que
cuando miras al sol y cierras los ojos y todo es un torbellino de variados
matices.
Algunas
mañanas, al despertar, me ocurre eso. Despego los párpados y observo los
compuestos destellos. Son puntos luminiscentes que vienen y van sin orden.
Se
apoltronan durante unos minutos, no sé si en mi imaginación o en mi propia
vista.
Ocurre
desde siempre. Desde niño. Siempre al despabilarme. Como un enjambre de
refulgentes verdades que irradian mi mente… y un sonido leve pero constante en
mis oídos. Como un rumor conciso que masculla su delirio en mi interior, me
sobrecoge y tardo en reaccionar y levantarme. Sólo la luz del alba, al abrir la
ventana, logra disuadir su efecto. Lo suelo llamar “mis sensaciones”. Algunos
dirían mis locuras, mi demencia o mi trastorno. Soy un pobre diablo de la calle
con arco iris en sus ojos.Ped.
Comentarios
Publicar un comentario