Si quieren algo pídanlo sin ningún reparo.

A boca llena...

Sin que se quede nada detrás.

Cuando se termine la función ya no 

habrá ayer ni tiempo con el que apresurar pasados.

Así que opriman el momento

y hagan del ahora un "ya" eterno...

y no divaguen,

sean díscolos,

traperos y malhablados.

Pidan, pidan sin importar celofán ni embalajes...

que en este circo de risueñas máscaras

a veces ofrecemos parodias con mesura

y otras damos dádivas sin parangón.

Porque solemos ser acacias floreciendo en noches lentas

y también matojos moribundos y resecos junto a las lindes del viento.

Por eso pidan...

pero pidan sin verjas, ni alambres, ni raíz que aten nada.

Pidan con vehemencia.

Sin que haya descanso en pedir...

Aunque exista una inquietud en la paradoja

de no vislumbrar futuro ni por qué.

Pidan y lastimen,

que la noche da misterios,

pero también lucidez y fragancia.

Pidan... pidan.


Lucifer hace tratos con todos...


Ped.

Pedro Javier Quintero.

Comentarios

Entradas populares de este blog